Los ciberfraudes han aumentado en los últimos años, tanto que las estafas virtuales constituyen el 65,52% de los delitos anuales en España.
En España existen dos leyes que protegen a los usuarios de este tipo de prácticas, la Ley de Servicios de Pago, que obliga a las entidades bancaria a devolver el dinero robado al cliente en caso de phising y la Ley General para la Defensa de los Consumidores y Usuarios que señala que toda transacción será válida siempre que exista el consentimiento del usuario.
Estas leyes no pretender acabar con los fraudes, pero si proteger lo máximo posible a las víctimas. Y por ello, es importante que conozcas tus derechos y qué debes hacer en caso de haber sufrido un ataque virtual con el que hayan robado tus datos o tu dinero.
Es importante estar atento para detectar el ciberfraude cuanto antes, si crees que has sido víctima de uno o vas a serlo, debes cambiar tus contraseñas de seguridad, activar el doble sistema de verificación de cuenta y contactar con tu banco para informales de tu situación y bloquear la tarjeta si es necesario.
Una vez, hayas revisado tus movimientos y tengas localizados los fraudulentos debes interponer una denuncia ante la Policía Nacional o la Guardia Civil. Ya que aunque no encuentren a los estafadores podrás ser indemnizado por la entidad bancaria.