Ahora que llega el verano, debemos tener especial cuidado con los fraudes por Internet usando como gancho alquileres temporales en la playa para pasar las vacaciones. La Policía Nacional alerta de que desde el 2020 este tipo de estafas se ha duplicado.
Los ciberdelincuentes utilizan distintas páginas web o incluso las redes sociales para publicitar un inmueble para las vacaciones de verano que no existe. Normalmente roban fotos de otros anuncios reales ya publicados y ponen unos precios más bajos a los de sus alrededores para que parezca más atractivo, pero no lo suficiente como para que parezca un engaño.
Cuando la víctima se pone en contacto con el supuesto propietario, este les pide un 40% del precio total antes de la llegada a modo de reserva y en el mejor de los casos, una vez que envías el primer pago el estafador desaparece. Sin embargo, en otras ocasiones la estafa dura hasta que los viajeros llegan al destino, van a buscar el alojamiento y descubren que no existe o que nunca contactaron con el verdadero propietario y solo querían robarles sus dinero.
Por ello, desde ASUFIN te recomendamos que seas muy cuidadoso a la hora de elegir alquileres vacacionales por Internet, que compares anuncios e imágenes por si se repiten, que leas las reseñas y comentarios de otros usuarios y que desconfíes de los precios de 300€ más baratos que el resto de los pisos de la zona. Por último, recuerda pedir y guardar los comprobantes de pago, las conversaciones y toda la información que tengas sobre el anuncio.