La banca tiene que encontrar el equilibrio y no ahondar más en la “desbancarización” de zonas rurales y barrios de grandes ciudades
ASUFIN quiere advertir de las consecuencias que puede tener el cierre de oficinas proyectado por dos de nuestras mayores entidades. Los planes expuestos por el sector pueden suponer que muchas poblaciones con escasa densidad de establecimientos bancarios se pueden ver abocadas a la “desbancarización”, a la incapacidad de realizar las necesarias gestiones financieras. Y no sólo se puede pensar en zonas rurales también en barrios de grandes ciudades que queden sin establecimiento bancario cercano.
Estas circunstancias afectan, sobre todo, a la población mayor acostumbrada a un trato personal y que encuentra mucha dificultad en gestionar a través de las herramientas digitales. También a numerosos pequeños comercios que necesitan de un establecimiento bancario para llevar a cabo operaciones de todo tipo.
Es importante también recalcar que las entidades financieras han recibido ayudas públicas, por lo que no se entiende que justo en estos momentos, y sin prever otro tipo de medidas, estén valorando despidos masivos que afectarán tan negativamente a muchas familias y a la economía en general.
Patricia Suárez, presidenta de ASUFIN declara que:
“Es imprescindible que el sector encuentro un sano equilibrio. Y estudie la manera de abordar los procesos de reestructuración y la digitalización con la necesaria atención a la población porque el financiero es también un servicio básico y esencial”.
“Conocemos y valoramos positivamente los planes de formación digital y financiera de las entidades financieras, a través de sus asociaciones como la AEB y CECA, pero precisamente porque saben que superar la brecha digital requiere de tiempo, no pueden aislar financieramente barrios y pueblos.”
“Las entidades financieras deben ser consecuentes con las ayudas públicas que han recibido y estudiar otro tipo de medidas de restructuración antes de despedir a miles de trabajadores.”