La decisión del Parlamento Europeo es un retroceso que penalizará el ahorro y la inversión de los ciudadanos y conducirá a la comercialización engañosa y greenwashing de productos
El pleno del Parlamento Europeo ha dado hoy luz verde a la controvertida hoja de ruta planteada por la Comisión Europea para considerar el gas natural y la energía nuclear energías verdes en la taxonomía comunitaria. Bajo la consideración de tecnologías de transición, no podrán ser reemplazas aún por fuentes más sostenibles. A nuestro juicio, alineados con el sentir mayoritario de los consumidores europeos representados en el BEUC, del que formamos parte, así como con WWF, con quienes estamos colaborando, esto representa un claro paso atrás.
Significa que la energía nuclear y el gas fósil podrían comercializarse de forma engañosa a los consumidores como inversiones «verdes», a pesar de los problemas bien documentados de riesgo y residuos radiactivos de la primera y de las emisiones de carbono de la segunda.
También aumentará la exposición de los consumidores a activos que queden en un futuro bloqueados (por ejemplo, las centrales de gas que se desmantelen para cumplir con los objetivos climáticos), contribuyendo con ello a devaluar, por ejemplo, los ahorros y las pensiones de los ciudadanos europeos.
Los organismos de decisión europeos han fracasado a la hora de tener en cuenta las expectativas de los consumidores, cada vez más concienciados en invertir su dinero de forma sostenible. Una reciente encuesta del Eurobarómetro daba a conocer que el 93% de los europeos considera que el cambio climático es un problema grave y que la mayoría no consideran que la energía nuclear y el gas fósil sean ecológicos.
Realizamos una intensa campaña de información, remitiendo documentación e instando al voto en contra, a los europarlamentarios españoles que participaban en la votación. Entre la documentación enviada, se incorporó la carta abierta a favor de una taxonomía verde real en la que instábamos, junto a 52 organizaciones financieras y medioambientales de toda Europa, en enero del año pasado a la Comisión Europea a proponer una taxonomía que identificara sin equívocos las actividades perjudiciales para el medio ambiente.
La Taxonomía es un instrumento que tiene como objetivo establecer los criterios para clasificar si una actividad económica es ambientalmente sostenible, a efectos de que los participantes en los mercados financieros y las empresas puedan identificar el grado de sostenibilidad de una inversión.
Un comentario
Xavier Massa Clastre: em sembla d’ escàndol la decisió de la Comissió Europea. No puc entendre com a aquestes alçades es pugui aprovar una llei de taxonomia ambiental que consideri l’ energia nuclear i el gas natural com energies verdes sostenibles.Tot plegat és un enorme engany al ciutadà que ha votat un parlament Europeu que el representi i defensi els interessos generals,i actualment l’ interès general primordial és la promoció de les energies verdes renovables i sostenibles. Quan deixaran d’ enganyar- nos i compliran amb el que prometen que faran? Qualsevol persona seria jutjada per molt menys si no complís la llei i ells se salten tots els compromisos establerts i no passa res. Aquesta Unió Europea no ens representa en absolut.