Patricia Suárez insiste, en una reunión con el Secretario General del Tesoro, en que la digitalización debe acometerse a dos velocidades para no dejar a nadie expulsado del sistema
La presidenta de ASUFIN, Patricia Suárez, se reunió ayer con el Secretario General del Tesoro y Financiación Internacional, Carlos Cuerpo, para trasladar al departamento las medidas que deben acometerse para paliar la exclusión financiera a la que se ven sometidos determinados colectivos, por la digitalización y concentración bancaria. Los datos demuestran que existe un problema: “La digitalización bancaria es un proceso inevitable pero debe abordarse a dos velocidades para no dejar a nadie atrás, fuera del sistema”, trasladó Suárez en la reunión.
Estas medidas no pueden ser sólo objeto del impulso legislativo del Gobierno sino también de las propias entidades que tienen una responsabilidad con la sociedad por constituir un servicio esencial.
Asimismo, la exclusión bancaria no sólo afecta a las personas mayores. También hay colectivos que se ven desplazados del sistema y que tienen que hacer frente a productos más onerosos, con comisiones más elevadas y condiciones difíciles de cumplir. Por ejemplo, trabajadores por cuenta propia que no cobran una nómina o ingreso único pero que, sin embargo, sí ingresan en el banco cantidades recurrentes asimilables y que, por ello, no acceden a determinadas bonificaciones, como el caso de las empleadas de hogar.
Desde ASUFIN apoyamos la campaña emprendida por Carlos San Juan, en Change.org, que “atención humana en las sucursales bancarias”, y que hoy entregará las más de 600.000 firmas en el Ministerio de Economía y el Banco de España.
Nuestro decálogo de medidas recoge que se debe facilitar la atención personalizada con cita previa, desarrollar aplicaciones básicas que permitan el acceso a la banca digital a todo tipo de usuarios y examinar ratios de presencia bancaria que determinen qué zonas están desbancarizadas (también en los barrios de las grandes ciudades).